ANÁLISIS DE LA EVOLUCIÓN Y ESTADO DE CONSERVACIÓN DE LOS BIENES Y SERVICIOS QUE PROPORCIONAN LAS COSTAS A LA SOCIEDAD. PRINCIPALES AMENAZAS Y RETOS DE FUTURO
AE-26, BIODIVERSIDAD 28/11/2018
“La superficie de costa urbanizada se ha duplicado desde la aprobación de la Ley de Costas hace 30 años.” Informe Greenpeace ‘A toda costa’.
La situación actual de las costas españolas deja los ecosistemas incapaces de generar los bienes y servicios necesarios para su desarrollo sostenible, según se ha publicado en el reciente Informe de Greenpeace ‘A toda costa’. El 80% de los bienes y servicios ambientales estudiados están en regresión y la causa es la artificialización del territorio, lo que ha supuesto una pérdida de capacidad de disfrute de los ecosistemas. El vector principal de transformación de las costas se desglosa en el sector turístico y el sector de las segundas residencias; sin embargo, estos sectores son insostenibles e incluso negativos económicamente. Dada la situación de la economía actual, vuelve a emerger la presión inmobiliaria sobre las costas, fomentándose el turismo estacional y poco atractivo. Es por ello que se debe cambiar la mentalidad y la forma de enfocar este sector. Es necesario incorporar criterios de eficiencia para transformar el entorno litoral, también se debe invertir en la actividad turística de calidad, generando experiencias para que esta sea productivo.
“Renovación por encima de crecimiento” planteaba Óscar Perelli del Amo de la asociación ‘Exceltur’. Es necesario un cambio de paradigma y de mentalidad. Aunque con la situación actual es muy difícil hacer una gestión sostenible de las costas, se debe conciliar el desarrollo con la sostenibilidad. Es evidente que no se pueden ignorar los intereses económicos del principal sector generador de ingresos en España, pero lo es también la necesidad de dar un nuevo enfoque sostenible y económico.
Las principales herramientas que existen para controlar el crecimiento urbano en el territorio costero son la Ley de Costas y la declaración de espacios protegidos. Esta última medida tiene una eficaz capacidad de protección, sin embargo, debe ser complementada y amparada bajo otras medidas. Por otro lado, la Ley de Costas se elaboró en el año 1988 de manera demasiado ambiciosa y con ciertas lagunas que se han aprovechado para sortearla. Ni si quiera su reforma ha sido suficiente o tan siquiera beneficiosa a la hora de mejorar la situación de las costas.
Es necesaria una mayor voluntad política y la elaboración de una estrategia o plan de actuación para llevar la ley a la realidad, puesto que la ausencia de este plan provocó que fallara la aplicación en su origen. Debería ser una estrategia liderada por el Gobierno que además se integrara también en los planes de ordenación urbana. La idea que se ha generado durante el debate como conclusión final es la importancia de dar un nuevo enfoque a este problema, un enfoque regional o incluso global para proteger los ecosistemas que ahora son insostenibles y poder así transformarlos. Para ello será necesaria una mayor dotación de recursos para poder aplicar eficazmente las medidas que contempla la legislación. Será necesario un gran consenso social que cuente con todos los agentes implicados.
Marta Santafé Martínez / Consultora independiente agua y medio ambiente / https://es.linkedin.com/in/martasantafe
Lara Hernández Fernández / Ingeniera del Medio Natural / https://es.linkedin.com/in/lara-hernández-fernández
FOTOS: